Hoy,mientras escucho por TV que por fin el dictador egipcio Mubarak ha escuchado el clamor populary ha dejado el poder,os presento una pequeña excursión que se puede considerar más un paseo que una ruta de senderismo pero que no está exenta de atractivos,pues discurre por algunos tramos de costa virgen y poco conocida.
Yo la recorrí el pasado verano del 2010 y hacia un sol de justicia,así que en este periodo del año la gorra es imprescindible.He perdido los datos que me dio el podómetro en cuanto a kilometraje y duración,pero aun así sudaremos la camiseta(caso de llevarla),y además hay que tener en cuenta que al final llegamos a un punto sin salido,por lo que tendremos que buscar bien la primera salida hasta la carretera o rehacer todo el recorrido,caso de haber dejado el vehículo en el punto de partida.
Iniciamos nuestra ruta en el paseo peatonal sobre la costa de Playa Paraiso,en dirección Callao Salvaje,y tendremos bonitas vistas de la playa más occidental de esta zona residencial,que se abre al final de un amplio barranco.Muy probablemente se trata de una playa artificial,pues es de una fina arena rubia y se han plantado algunas pequeñas palmeras.Siempre por la zona peatonal,rodeamos,bajamos y vadeamos este pedregoso barranco y volvemos a subir,teniendo otra hermosa perspectiva de la playa.Pasamos junto a la trasera del último edificio de apartamentos de la zona hasta que de repente,cuando ya soñamos con llegar a los cercanos edificios de Callao Salvaje,el paso en linea recta se interrumpe por un pequeño barranco y los muros de una zona de plataneras y el paseo nos conduce hacia el interior.
Aquí tenemos dos opciones,intentar salvar este paso con cuidado,entre las rocas,teniendo en cuenta que un mal paso nos conduce a una caida de 2 a 3 metros,o bien dar un muy largo rodeo por firme asfaltado,girando a la derecha.Si optamos por la esta segunda via,enseguida la zona peatonal se convierte en una larga calle que nos lleva dirección a la ctra de Los Gigantes,sin posibilidad de girar hacia la izquierda pues nos lo impiden fincas de plataneras,hasta que llegando a las últimas casas sí encontramos a la izquierda una ctra vecinal,el único atajo que conecta entre sí Playa Paraiso con Callao Salvaje,entre las plataneras.El problema es que el llegar a Callao nos hemos alejado bastante de la costa y ahora tenemos un trecho para bajar hasta ella.Por ello,yo recomiendo intentar pasar el barranquillo sin miedo por una veredilla.Nos ahorraremos muuucho camino.
Justo rebasado el barranco llegamos a una zona llana con un camino de tierra,ideal para pasear(veremos a turistas,parejas,gente paseando al perro...)que nos permite asomarnos a la costa virgen.Hay algunos charquitos naturales al quedar el mar casi cerrado por lenguas de tierra y también un pequeño roque aislado en las aguas.Luego ya la costa,sin ser de demasiada altura,es acantilada.
El camino de tierra nos conduce al final del acantilado,que se abre en la amplia playa de Callao Salvaje,cerrada por algún dique y por la punta de Ajabo.La playa tiene algo de arena negra,tierra y piedra,y no parece demasiado explotada.
Entramos en el nucleo de Callao Salvaje y debemos atravesarlo.Toda su costa está formada por un acantilado de mediana-baja altura,el problema es que es difícilmente accesible,ya que queda cerrado por los apartamentos y villas y la propiedad privada nos cierra el paso y la vista al mar,salvo en una plaza.Una pena.Lo vuelvo a intentar en las villas de la tranquila urbanización Sueño Azul,pero sus calles también se cortan antes de tener acceso a la costa.Así que tenemos que seguir por calles interiores,sin ver el mar,buscando la piscina pública(de pago)del lugar(algún cartel nos lo indicará).
Bajo la piscina(si no recuerdo mal tras atravesar un corto túnel)ya volvemos a tener acceso a la costa,en una pequeña cala de piedra y callaos.
Ya hemos dejado atrás Callao Salvaje.El resto de nuestro recorrido transcurrirá ya por caminos y sendas de tierra sobre un rocoso acantilado muy erosionado y en general de escasa altura,teniendo acceso directo al nivel del mar en algunas ocasiones y siempre con el aislado bloque de apartamentos de Marazul en el horizonte.
Pasaremos por lugares como el charco natural del Caballete o el Bañadero y tambien junto a una casa tipo chabola con toda probabilidad ilegal.Me acompaña un creciente ruido de fondo que descubro procede de los turistas de un barco de recreo que seguramente se dedica a organizar excursiones.
LLega un momento que el camino conecta con una ancha pista de tierra apta para el paso de vehículos,la seguimos y al llegar a una curva nos encontramos con una curiosa torreta en un estratégico altozano con bonitas vistas.Esta construcción hueca y con pequeños ventanales tiene toda la pinta de haber servido de faro o punto de vigilancia,y su interior me sirve de momentáneo refugio del implacable sol.
Bajamos por la pista y llegamos a un lugar que desconocía y conocido por diversos nombres,tales como Puerto de los Mozos,el Balito( también he encontrado la denominación Valito),antiguo Puerto Banana o Muelle Fyffes.Consta de un aparcamiento cubierto,un par de construcciones y un muelle con su pescante.Hay mucha animación,varios buceadores y bastantes bañistas tomando el sol en la explanada del muelle,que tiene unas escaleras por si apetece un bañito en el mar.El barco está justo enfrente y su música(eso era)resulta ensordecedora.
Buscando información en internet descubro que este conocido lugar es todo un refugio para los buceadores por sus limpios fondos y cueva submarina,y que durante décadas fue utilizado por la empresa inglesa Fyffes para la exportación del plátano y tomate,de ahí sus denominaciones.
Abandonamos la pista y debemos subir un poco,la máxima altura que alcanzaremos,para continuar la ruta,viendo como el muelle da una pequeña ensenada cerrada por la Punta de los Mozos,y seguiremos por un camino de nuevo sobre acantilado y cerrados por el interior por algunos murosy tierras,hasta que un barranco y los muros del complejo de Marazul nos cierran definitivamente el paso.Tenemos una inusual vista de este lugar residencial que solo conocía por su poca estética fachada principal.Lo que vemos es una ensenada con un paseo peatonal,aunque sin acceso directo al mar,y un lugar muy verde,ajardinado,tranquilo,todo cerrado por la Punta del Cangrejo.
No nos queda otra que retroceder y,como no encuentro un camino hacia la carretera,volver a Puerto de los Mozos,enlazar con la pista de tierra,cuyo firme es muy irregular y con socavones,y ahora sí seguirla,pasando por varios edificios abandonados que probablemente pertenecieron a Fyffes,hasta que en algo menos de 2 km empalmamos con la carretera que lleva a Los Gigantes.Justo aquí,donde no hay ninguna señal o cartel que anuncie dirección a Puerto de los Mozos,encontraremos una solitaria parada de guagua.
Otra opción es rehacer el camino completo hasta Callao o Playa Paraiso,si hemos dejado nuestro vehículo allí,teniendo una perspectiva diferente del recorrido.
Os dejo con la galería fotográfica.Un saludo
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